Estudio LED

¿Qué es la tecnología LED?.

Es la tecnología eficiente, ecológica y del futuro

Las ventajas de la tecnología LED varían según la aplicación. en general, esta tecnología ha demostrado toda su eficiencia gracias a una serie de elementos objetivos:

Gran ahorro energético y económico

La iluminación LED permite reducir el consumo eléctrico de luz hasta un 80%, sin renunciar a la calidad de ésta e incrementando la intensidad lumínica.

El consumo de los LED puede llegar a ser 8 o 9 veces menor que una bombilla incandescente y 2,5 veces menor que una bombilla de bajo consumo convencional. Gracias a estas características, la amortización de la inversión será muy rápida, reduciendo además los gastos de mantenimiento que serán casi nulos debido a su larga duración.

Productos y diseños ecológicos

Las luminarias LED no contienen ni tungsteno ni mercurio, elementos altamente contaminantes. En los dispositivos LED, el 99% de sus componentes son reciclables y su larga vida ayuda a preservar los recursos naturales. Además, no producen radiaciones de infrarrojos o ultravioletas, ni apenas emisión de calor, un factor ideal para espacios climatizados o sensibles al calor.

Duración, fiabilidad y resistencia

Un LED no tiene filamentos u otras partes mecánicas sujetas a roturas o a fallos por "fundido", sólo tiene una degradación progresiva a lo largo de su vida. De hecho, empieza a perder intensidad de forma gradual - por debajo del 70% aproximadamente - a los 6 años y puede llegar a tener una duración de entre 30.000 y 50.000 horas de vida. Esto significa que un LED, con una aplicación de 10 horas diarias 300 días al año, tiene una duración de entre 10 y 15 años. 
Las lámparas y, en general, los LED son mucho más resistentes a los golpes. Además, soportan mucho mejor las sobretensiones que puedan producirse en la red y no se queman.

Luz intensa y sin parpadeos

La luz LED es mucho más intensa y nítida que la del halógeno y el fluorescente, tiene un encendido inmediato (en microsegundos) y no tiene parpadeos ni variaciones de intensidad. Es sumamente adecuada para aplicaciones con encendidos y apagados frecuentes, sobre todo si la luz se utiliza solo durante breves espacios de tiempo, porque la conmutación muy repetida no afecta en la vida útil del LED.

Gran adaptabilidad

Las soluciones de iluminación LED siempre se adaptan a sus necesidades específicas por su pequeño tamaño y gran potencia lumínica. Representan una tecnología interesante y versátil para los diseñadores: tienen múltiples posibilidades de adaptación, tanto en el color y la intensidad como la forma.

Cualquiera que sea la escala de su necesidad, podemos ayudarle durante la planificación, el desarrollo y compartir con usted nuestros conocimientos en tecnología de iluminación. 

 

 

 

 

 

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Es la tecnología eficiente, ecológica y del futuro

Las ventajas de la tecnología LED varían según la aplicación. en general, esta tecnología ha demostrado toda su eficiencia gracias a una serie de elementos objetivos:

Gran ahorro energético y económico

La iluminación LED permite reducir el consumo eléctrico de luz hasta un 80%, sin renunciar a la calidad de ésta e incrementando la intensidad lumínica.

El consumo de los LED puede llegar a ser 8 o 9 veces menor que una bombilla incandescente y 2,5 veces menor que una bombilla de bajo consumo convencional. Gracias a estas características, la amortización de la inversión será muy rápida, reduciendo además los gastos de mantenimiento que serán casi nulos debido a su larga duración.

Productos y diseños ecológicos

Las luminarias LED no contienen ni tungsteno ni mercurio, elementos altamente contaminantes. En los dispositivos LED, el 99% de sus componentes son reciclables y su larga vida ayuda a preservar los recursos naturales. Además, no producen radiaciones de infrarrojos o ultravioletas, ni apenas emisión de calor, un factor ideal para espacios climatizados o sensibles al calor.

Duración, fiabilidad y resistencia

Un LED no tiene filamentos u otras partes mecánicas sujetas a roturas o a fallos por "fundido", sólo tiene una degradación progresiva a lo largo de su vida. De hecho, empieza a perder intensidad de forma gradual - por debajo del 70% aproximadamente - a los 6 años y puede llegar a tener una duración de entre 30.000 y 50.000 horas de vida. Esto significa que un LED, con una aplicación de 10 horas diarias 300 días al año, tiene una duración de entre 10 y 15 años. 
Las lámparas y, en general, los LED son mucho más resistentes a los golpes. Además, soportan mucho mejor las sobretensiones que puedan producirse en la red y no se queman.

Luz intensa y sin parpadeos

La luz LED es mucho más intensa y nítida que la del halógeno y el fluorescente, tiene un encendido inmediato (en microsegundos) y no tiene parpadeos ni variaciones de intensidad. Es sumamente adecuada para aplicaciones con encendidos y apagados frecuentes, sobre todo si la luz se utiliza solo durante breves espacios de tiempo, porque la conmutación muy repetida no afecta en la vida útil del LED.

Gran adaptabilidad

Las soluciones de iluminación LED siempre se adaptan a sus necesidades específicas por su pequeño tamaño y gran potencia lumínica. Representan una tecnología interesante y versátil para los diseñadores: tienen múltiples posibilidades de adaptación, tanto en el color y la intensidad como la forma.

Cualquiera que sea la escala de su necesidad, podemos ayudarle durante la planificación, el desarrollo y compartir con usted nuestros conocimientos en tecnología de iluminación. 

 

 

 

 

 

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Gran ahorro energético y económico

La iluminación LED permite reducir el consumo eléctrico de luz hasta un 80%, sin renunciar a la calidad de ésta e incrementando la intensidad lumínica.

El consumo de los LED puede llegar a ser 8 o 9 veces menor que una bombilla incandescente y 2,5 veces menor que una bombilla de bajo consumo convencional. Gracias a estas características, la amortización de la inversión será muy rápida, reduciendo además los gastos de mantenimiento que serán casi nulos debido a su larga duración.

Productos y diseños ecológicos

Las luminarias LED no contienen ni tungsteno ni mercurio, elementos altamente contaminantes. En los dispositivos LED, el 99% de sus componentes son reciclables y su larga vida ayuda a preservar los recursos naturales. Además, no producen radiaciones de infrarrojos o ultravioletas, ni apenas emisión de calor, un factor ideal para espacios climatizados o sensibles al calor.

Duración, fiabilidad y resistencia

Un LED no tiene filamentos u otras partes mecánicas sujetas a roturas o a fallos por "fundido", sólo tiene una degradación progresiva a lo largo de su vida. De hecho, empieza a perder intensidad de forma gradual - por debajo del 70% aproximadamente - a los 6 años y puede llegar a tener una duración de entre 30.000 y 50.000 horas de vida. Esto significa que un LED, con una aplicación de 10 horas diarias 300 días al año, tiene una duración de entre 10 y 15 años. 
Las lámparas y, en general, los LED son mucho más resistentes a los golpes. Además, soportan mucho mejor las sobretensiones que puedan producirse en la red y no se queman.

Luz intensa y sin parpadeos

La luz LED es mucho más intensa y nítida que la del halógeno y el fluorescente, tiene un encendido inmediato (en microsegundos) y no tiene parpadeos ni variaciones de intensidad. Es sumamente adecuada para aplicaciones con encendidos y apagados frecuentes, sobre todo si la luz se utiliza solo durante breves espacios de tiempo, porque la conmutación muy repetida no afecta en la vida útil del LED.

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Cualquiera que sea la escala de su necesidad, podemos ayudarle durante la planificación, el desarrollo y compartir con usted nuestros conocimientos en tecnología de iluminación. 

 

 

 

 

 

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Las lámparas y, en general, los LED son mucho más resistentes a los golpes. Además, soportan mucho mejor las sobretensiones que puedan producirse en la red y no se queman.

Luz intensa y sin parpadeos

La luz LED es mucho más intensa y nítida que la del halógeno y el fluorescente, tiene un encendido inmediato (en microsegundos) y no tiene parpadeos ni variaciones de intensidad. Es sumamente adecuada para aplicaciones con encendidos y apagados frecuentes, sobre todo si la luz se utiliza solo durante breves espacios de tiempo, porque la conmutación muy repetida no afecta en la vida útil del LED.

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Un LED no tiene filamentos u otras partes mecánicas sujetas a roturas o a fallos por "fundido", sólo tiene una degradación progresiva a lo largo de su vida. De hecho, empieza a perder intensidad de forma gradual - por debajo del 70% aproximadamente - a los 6 años y puede llegar a tener una duración de entre 30.000 y 50.000 horas de vida. Esto significa que un LED, con una aplicación de 10 horas diarias 300 días al año, tiene una duración de entre 10 y 15 años. 
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La iluminación LED permite reducir el consumo eléctrico de luz hasta un 80%, sin renunciar a la calidad de ésta e incrementando la intensidad lumínica.

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Las luminarias LED no contienen ni tungsteno ni mercurio, elementos altamente contaminantes. En los dispositivos LED, el 99% de sus componentes son reciclables y su larga vida ayuda a preservar los recursos naturales. Además, no producen radiaciones de infrarrojos o ultravioletas, ni apenas emisión de calor, un factor ideal para espacios climatizados o sensibles al calor.

Duración, fiabilidad y resistencia

Un LED no tiene filamentos u otras partes mecánicas sujetas a roturas o a fallos por "fundido", sólo tiene una degradación progresiva a lo largo de su vida. De hecho, empieza a perder intensidad de forma gradual - por debajo del 70% aproximadamente - a los 6 años y puede llegar a tener una duración de entre 30.000 y 50.000 horas de vida. Esto significa que un LED, con una aplicación de 10 horas diarias 300 días al año, tiene una duración de entre 10 y 15 años. 
Las lámparas y, en general, los LED son mucho más resistentes a los golpes. Además, soportan mucho mejor las sobretensiones que puedan producirse en la red y no se queman.

Luz intensa y sin parpadeos

La luz LED es mucho más intensa y nítida que la del halógeno y el fluorescente, tiene un encendido inmediato (en microsegundos) y no tiene parpadeos ni variaciones de intensidad. Es sumamente adecuada para aplicaciones con encendidos y apagados frecuentes, sobre todo si la luz se utiliza solo durante breves espacios de tiempo, porque la conmutación muy repetida no afecta en la vida útil del LED.

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Un LED no tiene filamentos u otras partes mecánicas sujetas a roturas o a fallos por "fundido", sólo tiene una degradación progresiva a lo largo de su vida. De hecho, empieza a perder intensidad de forma gradual - por debajo del 70% aproximadamente - a los 6 años y puede llegar a tener una duración de entre 30.000 y 50.000 horas de vida. Esto significa que un LED, con una aplicación de 10 horas diarias 300 días al año, tiene una duración de entre 10 y 15 años. 
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Un LED no tiene filamentos u otras partes mecánicas sujetas a roturas o a fallos por "fundido", sólo tiene una degradación progresiva a lo largo de su vida. De hecho, empieza a perder intensidad de forma gradual - por debajo del 70% aproximadamente - a los 6 años y puede llegar a tener una duración de entre 30.000 y 50.000 horas de vida. Esto significa que un LED, con una aplicación de 10 horas diarias 300 días al año, tiene una duración de entre 10 y 15 años. 
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La luz LED es mucho más intensa y nítida que la del halógeno y el fluorescente, tiene un encendido inmediato (en microsegundos) y no tiene parpadeos ni variaciones de intensidad. Es sumamente adecuada para aplicaciones con encendidos y apagados frecuentes, sobre todo si la luz se utiliza solo durante breves espacios de tiempo, porque la conmutación muy repetida no afecta en la vida útil del LED.

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La luz LED es mucho más intensa y nítida que la del halógeno y el fluorescente, tiene un encendido inmediato (en microsegundos) y no tiene parpadeos ni variaciones de intensidad. Es sumamente adecuada para aplicaciones con encendidos y apagados frecuentes, sobre todo si la luz se utiliza solo durante breves espacios de tiempo, porque la conmutación muy repetida no afecta en la vida útil del LED.

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Duración, fiabilidad y resistencia

Un LED no tiene filamentos u otras partes mecánicas sujetas a roturas o a fallos por "fundido", sólo tiene una degradación progresiva a lo largo de su vida. De hecho, empieza a perder intensidad de forma gradual - por debajo del 70% aproximadamente - a los 6 años y puede llegar a tener una duración de entre 30.000 y 50.000 horas de vida. Esto significa que un LED, con una aplicación de 10 horas diarias 300 días al año, tiene una duración de entre 10 y 15 años. 
Las lámparas y, en general, los LED son mucho más resistentes a los golpes. Además, soportan mucho mejor las sobretensiones que puedan producirse en la red y no se queman.

Luz intensa y sin parpadeos

La luz LED es mucho más intensa y nítida que la del halógeno y el fluorescente, tiene un encendido inmediato (en microsegundos) y no tiene parpadeos ni variaciones de intensidad. Es sumamente adecuada para aplicaciones con encendidos y apagados frecuentes, sobre todo si la luz se utiliza solo durante breves espacios de tiempo, porque la conmutación muy repetida no afecta en la vida útil del LED.

Gran adaptabilidad

Las soluciones de iluminación LED siempre se adaptan a sus necesidades específicas por su pequeño tamaño y gran potencia lumínica. Representan una tecnología interesante y versátil para los diseñadores: tienen múltiples posibilidades de adaptación, tanto en el color y la intensidad como la forma.

Cualquiera que sea la escala de su necesidad, podemos ayudarle durante la planificación, el desarrollo y compartir con usted nuestros conocimientos en tecnología de iluminación. 

 

 

 

 

 

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Estudio LED

¿Qué es la tecnología LED?.

Es la tecnología eficiente, ecológica y del futuro

Las ventajas de la tecnología LED varían según la aplicación. en general, esta tecnología ha demostrado toda su eficiencia gracias a una serie de elementos objetivos:

Gran ahorro energético y económico

La iluminación LED permite reducir el consumo eléctrico de luz hasta un 80%, sin renunciar a la calidad de ésta e incrementando la intensidad lumínica.

El consumo de los LED puede llegar a ser 8 o 9 veces menor que una bombilla incandescente y 2,5 veces menor que una bombilla de bajo consumo convencional. Gracias a estas características, la amortización de la inversión será muy rápida, reduciendo además los gastos de mantenimiento que serán casi nulos debido a su larga duración.

Productos y diseños ecológicos

Las luminarias LED no contienen ni tungsteno ni mercurio, elementos altamente contaminantes. En los dispositivos LED, el 99% de sus componentes son reciclables y su larga vida ayuda a preservar los recursos naturales. Además, no producen radiaciones de infrarrojos o ultravioletas, ni apenas emisión de calor, un factor ideal para espacios climatizados o sensibles al calor.

Duración, fiabilidad y resistencia

Un LED no tiene filamentos u otras partes mecánicas sujetas a roturas o a fallos por "fundido", sólo tiene una degradación progresiva a lo largo de su vida. De hecho, empieza a perder intensidad de forma gradual - por debajo del 70% aproximadamente - a los 6 años y puede llegar a tener una duración de entre 30.000 y 50.000 horas de vida. Esto significa que un LED, con una aplicación de 10 horas diarias 300 días al año, tiene una duración de entre 10 y 15 años. 
Las lámparas y, en general, los LED son mucho más resistentes a los golpes. Además, soportan mucho mejor las sobretensiones que puedan producirse en la red y no se queman.

Luz intensa y sin parpadeos

La luz LED es mucho más intensa y nítida que la del halógeno y el fluorescente, tiene un encendido inmediato (en microsegundos) y no tiene parpadeos ni variaciones de intensidad. Es sumamente adecuada para aplicaciones con encendidos y apagados frecuentes, sobre todo si la luz se utiliza solo durante breves espacios de tiempo, porque la conmutación muy repetida no afecta en la vida útil del LED.

Gran adaptabilidad

Las soluciones de iluminación LED siempre se adaptan a sus necesidades específicas por su pequeño tamaño y gran potencia lumínica. Representan una tecnología interesante y versátil para los diseñadores: tienen múltiples posibilidades de adaptación, tanto en el color y la intensidad como la forma.

Cualquiera que sea la escala de su necesidad, podemos ayudarle durante la planificación, el desarrollo y compartir con usted nuestros conocimientos en tecnología de iluminación. 

 

 

 

 

 

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Estudio LED

¿Qué es la tecnología LED?.

Es la tecnología eficiente, ecológica y del futuro

Las ventajas de la tecnología LED varían según la aplicación. en general, esta tecnología ha demostrado toda su eficiencia gracias a una serie de elementos objetivos:

Gran ahorro energético y económico

La iluminación LED permite reducir el consumo eléctrico de luz hasta un 80%, sin renunciar a la calidad de ésta e incrementando la intensidad lumínica.

El consumo de los LED puede llegar a ser 8 o 9 veces menor que una bombilla incandescente y 2,5 veces menor que una bombilla de bajo consumo convencional. Gracias a estas características, la amortización de la inversión será muy rápida, reduciendo además los gastos de mantenimiento que serán casi nulos debido a su larga duración.

Productos y diseños ecológicos

Las luminarias LED no contienen ni tungsteno ni mercurio, elementos altamente contaminantes. En los dispositivos LED, el 99% de sus componentes son reciclables y su larga vida ayuda a preservar los recursos naturales. Además, no producen radiaciones de infrarrojos o ultravioletas, ni apenas emisión de calor, un factor ideal para espacios climatizados o sensibles al calor.

Duración, fiabilidad y resistencia

Un LED no tiene filamentos u otras partes mecánicas sujetas a roturas o a fallos por "fundido", sólo tiene una degradación progresiva a lo largo de su vida. De hecho, empieza a perder intensidad de forma gradual - por debajo del 70% aproximadamente - a los 6 años y puede llegar a tener una duración de entre 30.000 y 50.000 horas de vida. Esto significa que un LED, con una aplicación de 10 horas diarias 300 días al año, tiene una duración de entre 10 y 15 años. 
Las lámparas y, en general, los LED son mucho más resistentes a los golpes. Además, soportan mucho mejor las sobretensiones que puedan producirse en la red y no se queman.

Luz intensa y sin parpadeos

La luz LED es mucho más intensa y nítida que la del halógeno y el fluorescente, tiene un encendido inmediato (en microsegundos) y no tiene parpadeos ni variaciones de intensidad. Es sumamente adecuada para aplicaciones con encendidos y apagados frecuentes, sobre todo si la luz se utiliza solo durante breves espacios de tiempo, porque la conmutación muy repetida no afecta en la vida útil del LED.

Gran adaptabilidad

Las soluciones de iluminación LED siempre se adaptan a sus necesidades específicas por su pequeño tamaño y gran potencia lumínica. Representan una tecnología interesante y versátil para los diseñadores: tienen múltiples posibilidades de adaptación, tanto en el color y la intensidad como la forma.

Cualquiera que sea la escala de su necesidad, podemos ayudarle durante la planificación, el desarrollo y compartir con usted nuestros conocimientos en tecnología de iluminación. 

 

 

 

 

 

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Estudio LED

¿Qué es la tecnología LED?.

Es la tecnología eficiente, ecológica y del futuro

Las ventajas de la tecnología LED varían según la aplicación. en general, esta tecnología ha demostrado toda su eficiencia gracias a una serie de elementos objetivos:

Gran ahorro energético y económico

La iluminación LED permite reducir el consumo eléctrico de luz hasta un 80%, sin renunciar a la calidad de ésta e incrementando la intensidad lumínica.

El consumo de los LED puede llegar a ser 8 o 9 veces menor que una bombilla incandescente y 2,5 veces menor que una bombilla de bajo consumo convencional. Gracias a estas características, la amortización de la inversión será muy rápida, reduciendo además los gastos de mantenimiento que serán casi nulos debido a su larga duración.

Productos y diseños ecológicos

Las luminarias LED no contienen ni tungsteno ni mercurio, elementos altamente contaminantes. En los dispositivos LED, el 99% de sus componentes son reciclables y su larga vida ayuda a preservar los recursos naturales. Además, no producen radiaciones de infrarrojos o ultravioletas, ni apenas emisión de calor, un factor ideal para espacios climatizados o sensibles al calor.

Duración, fiabilidad y resistencia

Un LED no tiene filamentos u otras partes mecánicas sujetas a roturas o a fallos por "fundido", sólo tiene una degradación progresiva a lo largo de su vida. De hecho, empieza a perder intensidad de forma gradual - por debajo del 70% aproximadamente - a los 6 años y puede llegar a tener una duración de entre 30.000 y 50.000 horas de vida. Esto significa que un LED, con una aplicación de 10 horas diarias 300 días al año, tiene una duración de entre 10 y 15 años. 
Las lámparas y, en general, los LED son mucho más resistentes a los golpes. Además, soportan mucho mejor las sobretensiones que puedan producirse en la red y no se queman.

Luz intensa y sin parpadeos

La luz LED es mucho más intensa y nítida que la del halógeno y el fluorescente, tiene un encendido inmediato (en microsegundos) y no tiene parpadeos ni variaciones de intensidad. Es sumamente adecuada para aplicaciones con encendidos y apagados frecuentes, sobre todo si la luz se utiliza solo durante breves espacios de tiempo, porque la conmutación muy repetida no afecta en la vida útil del LED.

Gran adaptabilidad

Las soluciones de iluminación LED siempre se adaptan a sus necesidades específicas por su pequeño tamaño y gran potencia lumínica. Representan una tecnología interesante y versátil para los diseñadores: tienen múltiples posibilidades de adaptación, tanto en el color y la intensidad como la forma.

Cualquiera que sea la escala de su necesidad, podemos ayudarle durante la planificación, el desarrollo y compartir con usted nuestros conocimientos en tecnología de iluminación. 

 

 

 

 

 

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Las ventajas de la tecnología LED varían según la aplicación. en general, esta tecnología ha demostrado toda su eficiencia gracias a una serie de elementos objetivos:

Gran ahorro energético y económico

La iluminación LED permite reducir el consumo eléctrico de luz hasta un 80%, sin renunciar a la calidad de ésta e incrementando la intensidad lumínica.

El consumo de los LED puede llegar a ser 8 o 9 veces menor que una bombilla incandescente y 2,5 veces menor que una bombilla de bajo consumo convencional. Gracias a estas características, la amortización de la inversión será muy rápida, reduciendo además los gastos de mantenimiento que serán casi nulos debido a su larga duración.

Productos y diseños ecológicos

Las luminarias LED no contienen ni tungsteno ni mercurio, elementos altamente contaminantes. En los dispositivos LED, el 99% de sus componentes son reciclables y su larga vida ayuda a preservar los recursos naturales. Además, no producen radiaciones de infrarrojos o ultravioletas, ni apenas emisión de calor, un factor ideal para espacios climatizados o sensibles al calor.

Duración, fiabilidad y resistencia

Un LED no tiene filamentos u otras partes mecánicas sujetas a roturas o a fallos por "fundido", sólo tiene una degradación progresiva a lo largo de su vida. De hecho, empieza a perder intensidad de forma gradual - por debajo del 70% aproximadamente - a los 6 años y puede llegar a tener una duración de entre 30.000 y 50.000 horas de vida. Esto significa que un LED, con una aplicación de 10 horas diarias 300 días al año, tiene una duración de entre 10 y 15 años. 
Las lámparas y, en general, los LED son mucho más resistentes a los golpes. Además, soportan mucho mejor las sobretensiones que puedan producirse en la red y no se queman.

Luz intensa y sin parpadeos

La luz LED es mucho más intensa y nítida que la del halógeno y el fluorescente, tiene un encendido inmediato (en microsegundos) y no tiene parpadeos ni variaciones de intensidad. Es sumamente adecuada para aplicaciones con encendidos y apagados frecuentes, sobre todo si la luz se utiliza solo durante breves espacios de tiempo, porque la conmutación muy repetida no afecta en la vida útil del LED.

Gran adaptabilidad

Las soluciones de iluminación LED siempre se adaptan a sus necesidades específicas por su pequeño tamaño y gran potencia lumínica. Representan una tecnología interesante y versátil para los diseñadores: tienen múltiples posibilidades de adaptación, tanto en el color y la intensidad como la forma.

Cualquiera que sea la escala de su necesidad, podemos ayudarle durante la planificación, el desarrollo y compartir con usted nuestros conocimientos en tecnología de iluminación. 

 

 

 

 

 

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¿Qué es la tecnología LED?.

Es la tecnología eficiente, ecológica y del futuro

Las ventajas de la tecnología LED varían según la aplicación. en general, esta tecnología ha demostrado toda su eficiencia gracias a una serie de elementos objetivos:

Gran ahorro energético y económico

La iluminación LED permite reducir el consumo eléctrico de luz hasta un 80%, sin renunciar a la calidad de ésta e incrementando la intensidad lumínica.

El consumo de los LED puede llegar a ser 8 o 9 veces menor que una bombilla incandescente y 2,5 veces menor que una bombilla de bajo consumo convencional. Gracias a estas características, la amortización de la inversión será muy rápida, reduciendo además los gastos de mantenimiento que serán casi nulos debido a su larga duración.

Productos y diseños ecológicos

Las luminarias LED no contienen ni tungsteno ni mercurio, elementos altamente contaminantes. En los dispositivos LED, el 99% de sus componentes son reciclables y su larga vida ayuda a preservar los recursos naturales. Además, no producen radiaciones de infrarrojos o ultravioletas, ni apenas emisión de calor, un factor ideal para espacios climatizados o sensibles al calor.

Duración, fiabilidad y resistencia

Un LED no tiene filamentos u otras partes mecánicas sujetas a roturas o a fallos por "fundido", sólo tiene una degradación progresiva a lo largo de su vida. De hecho, empieza a perder intensidad de forma gradual - por debajo del 70% aproximadamente - a los 6 años y puede llegar a tener una duración de entre 30.000 y 50.000 horas de vida. Esto significa que un LED, con una aplicación de 10 horas diarias 300 días al año, tiene una duración de entre 10 y 15 años. 
Las lámparas y, en general, los LED son mucho más resistentes a los golpes. Además, soportan mucho mejor las sobretensiones que puedan producirse en la red y no se queman.

Luz intensa y sin parpadeos

La luz LED es mucho más intensa y nítida que la del halógeno y el fluorescente, tiene un encendido inmediato (en microsegundos) y no tiene parpadeos ni variaciones de intensidad. Es sumamente adecuada para aplicaciones con encendidos y apagados frecuentes, sobre todo si la luz se utiliza solo durante breves espacios de tiempo, porque la conmutación muy repetida no afecta en la vida útil del LED.

Gran adaptabilidad

Las soluciones de iluminación LED siempre se adaptan a sus necesidades específicas por su pequeño tamaño y gran potencia lumínica. Representan una tecnología interesante y versátil para los diseñadores: tienen múltiples posibilidades de adaptación, tanto en el color y la intensidad como la forma.

Cualquiera que sea la escala de su necesidad, podemos ayudarle durante la planificación, el desarrollo y compartir con usted nuestros conocimientos en tecnología de iluminación. 

 

 

 

 

 

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